Sección 4: Etapas para la creación y gestión de corredores biológicos.

En sus inicios, el establecimiento de corredores biológicos respondía a la necesidad de restablecer la conectividad ecológica entre fragmentos de hábitat en una matriz de paisaje para permitir el flujo genético y de especies.  Con el pasar del tiempo y con la evolución de los modelos de conectividad, el propósito de los corredores se ha ampliado al establecimiento de redes ecológicas con fines no sólo de conservación de la biodiversidad sino también de los medios de vida de las comunidades que interactúan y se benefician de los servicios que proveen los ecosistemas en ese paisaje.  Así, los corredores biológicos han evolucionado hasta convertirse en espacios de concertación donde las comunidades ven una oportunidad para abordar problemáticas ambientales que guardan estrecha relación con el desarrollo de sus territorios.  Es así como múltiples actores intervienen en el proceso de creación y establecimiento de un corredor biológico, en diferentes momentos, movidos por diversos intereses y cumpliendo distintos roles en cada una de las etapas. 

Se pueden distinguir 5 etapas en el proceso de creación y gestión de los corredores biológicos.  Estas etapas, aunque se describen como una secuencia lineal para su mejor comprensión, se integran en un proceso iterativo donde los resultados de una fase pueden revisarse periódicamente a la luz de nueva información disponible y ser ajustados según las necesidades.  Este manejo adaptativo permite integrar nueva información y conocimiento que surge de la experiencia, de la integración de nuevos participantes al proceso, de cambios en el contexto y de la misma puesta en marcha de las acciones de gestión en el corredor.   Estas etapas son: